hubo varias en su término. Algo similar
ocurre con las carboneras.
Esta era la técnica usada para fabricar
la cal en Sigüés. Se construían unos hornos en
diferentes lugares y de los que todavía
hay restos de algunos de ellos. El más cercano es
el de Detrás del Puente, hoy cubierto
de maleza. Eran similares a un pozo de agua pero
cubiertos con una bóveda. En la parte
baja había una abertura por donde se introducía
la leña. En la parte de arriba se
colocaban las rocas. Estas daban distinta clase de cal
dependiendo de la procedencia de ellas:
la del Espiso era más oscura y se empleaba
como mortero; las piedras que se
bajaban de la parte de la ermita de san Juan, con los
rastrones, daban una cal muy blanca.
Los hornos ardían día y noche durante dos o más
Se solían juntar dos o más familias
pues el trabajo era muy duro y costoso. En casi todas
las casas había un lugar donde se
guardaba la cal que luego utilizaban en el blanqueo y
desinfección de las mismas.
Al parecer, en el terreno comprendido
entre El Espiso y el Medidor, en el paraje de la Iruela, hay dos caleras. Una está debajo de
Canal de Gallego, y la otra esta cerca de la muga con Salvatierra, las dos en la parte de
abajo de la pista. (Siguesaragonblogspot)
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