Amplia oquedad en la sierra de Orba,
donde se han llegado a cobijar hasta 400 ovejas.
Se va estrechando y su exploración
espeleológica es posible con la equipación adecuada.
No se han recogido leyendas
relacionadas, si bien, se relaciona con la presencia de
moros en ella y en Asso, donde la
llaman Cueva de la Mora señalan que se decía que ahí
vivía una mora. “Esto estuvo con
moros” indican.
También Antonio Casajús sostiene que aquí vivieron los moros. Se
acuerda de un hombre de Casa Landa, que bajó de Santa Cruz de la Serós a casa de la Venta de
Sigüés a vivir, y vivió de pequeño en Santa Cruz. Era tío del boxeador. Su madrastra le
decía que fuese a las vacas, al monte, y le advertía de que allí había unos mocetes negros,
moros, y que jugara con ellos. “Y él los vio, y jugó con ellos” afirma Antonio
Casajús. Le decían en casa que no tuviera miedo, porquen no le iban a hacer nada. Vivían en las
cuevas que abundan en Santa Cruz y él recuerda que se ponía contento al jugar con
ellos.
Por otro lado, en los días de mal
tiempo en invierno, se dice que “las cabras huelen
la nieve y días antes ya se cobijan en
la Cueva del Moro”.
Según Carlos Lampérez la
cueva es muy grande: “Nadie sabe dónde
acaba. El abuelo de la Chesa entró con uno
de Casa Gila con dos sogas de los
machos de 30-40 metros, pero se les acabó la soga
y se acojonaron.”
Kuéba del móro (1995, SG). Kuéba
de la móra (Asso-Veral).
Moro, fuente del
En la sierra de Orba. Poco antes de
llegar a la muga de Asso-Veral.
Fuénte del móro (1995, SG).